• Símbolo: Dos guanteletes cruzados, escamosos y con garras, de metal azul plateado
  • Alineamiento: Caótico Bueno
  • Áreas de Control: Druidas, habitantes de las junglas, exploradores, enanos salvajes
  • Dominios: Animal, Bien, Caos, Enano, Vegetal
  • Arma Predilecta: Arma predilecta: guantelete con garras (guantelete armado)
  • Escenario: Reinos Olvidados

Cuando se encuentran con el tatuado y panzudo Zhard Harr (una oscura y salvaje criatura que lleva un ornamentado yelmo de cobre con la forma de una cabeza de cocodrilo), pocos podrían sospechar que están mirando a un miembro de los Morndinsamman.

Aunque distanciado de su gente tanto emocional como geográficamente, Zhard Harr comparte a pesar de todo la sangre de Moradin. Patrón de los enanos salvajes que habitan las junglas de Faerûn (en especial Khult), Zhard Harr protege a los que están a su cargo de las bestias salvajes merodeadoras, los ataques de los dinosaurios hambrientos y las incursiones no deseadas de extranjeros.

Historia/Relaciones

Aparte de infrecuentes visitas de Sharindlar y Dumazhoin, Zhard Harr no comparte casi ninguna relación con los hijos de Moradin. En las raras ocasiones en que el panteón entero debe reunirse, Zhard Harr se distancia más que aproximarse, no porque se niegue a hablar, sino porque se comunica mediante una extraña serie de llamadas animales y gestos físicos.

Prefiere absolutamente la compañía de otras deidades de la naturaleza, como Ubtao, Nobanión y Úzhgar. Zhard es un enemigo declarado de Shar, que actúa en Khult bajo el nombre de Eshudu (una deidad de la sombra que absorbió), y una docena de otras deidades de la jungla y demonios de los que raras veces tienen noticia los habitantes civilizados de Faerûn.

Relaciones

Dogma

Como los grandes tigres de la jungla, sé fuerte y cuidadoso con las bestias, caminen éstas sobre cuatro patas o sobre dos. Vive en armonía con la naturaleza y obtén la protección del señor de las Profundidades de la jungla. Trata de comprender lo que no comprendas, pero sé precavido respecto a traer dones desconocidos a tu guarida. Honra los modos de tu gente, pero no asumas que los senderos de Zhard son los únicos: tan solo los mejores para sus hijos.

Clérigos de Zhard Harr

Los clérigos y druidas de Zhard, conocidos como vuddor ("los de la jungla") disfrutan de una posición reverenciada en sus protegidas tierras natales. La adoración de Zhard Harr está tan profundamente unida a la sociedad de los enanos salvajes que pocos consideran siquiera la posibilidad de otras religiones. Aunque algunos enanos dorados del sur (especialmente los que habitan cerca de las ruinas de Shanatar alto) recuerdan los cuentos de sus antepasados sobre Zhard como una deidad enana perdida de la naturaleza, la mayoría de los enanos salvajes permanecen completamente ignorantes del resto de los Morndinsamman, un fallo que Zhard no hace nada para mejorar.

Los vuddor están al cargo de las cacerías prósperas, actúan como generales para los escasamente organizados ejércitos de los enanos salvajes y hablan por el conjunto de la sociedad. Zhard no apoya templos formales, instruyendo en su lugar a sus seguidores para que traten los lugares de gran belleza natural (como llanuras Volcánicas, jardines naturales o cascadas) como sus salas de adoración.

Los vuddor rezan para sus conjuros por la mañana. En las noches de luna llena o luna nueva, el clérigo de Zhard Harr de mayor nivel en la región convoca una reunión formal de numerosos grupos de caza, y los cánticos, tamborileos y gritos resultantes son suficientes como para espantar hasta al intruso más desesperado. En estas reuniones los enanos ofrecen sacrificios de sangre de dinosaurios o intrusos capturados (algunas de las tribus más aisladas a veces sacrifican a desafortunados humanos buenos de este modo, y aunque Zhard desaprueba esto no ha hecho nada para comunicar este desagrado a sus fieles). Estos sacrificios son consumidos prácticamente siempre por los participantes, en un esfuerzo para alcanzar una mayor Cercanía con su benefactor divino.

Los vuddor a veces se hacen multiclase como exploradores.